Para nadie es ya cuestionable que durante los
últimos cinco años la ciudadanía española ha sido víctima de una estafa de
grandes dimensiones propiciada por un sistema dañino en sí mismo y que no
dejará de provocar estos desastres hasta
que sea, no ya reformado, porque eso no sirve, sino absolutamente abolido y destruido.
Esta estafa gigantesca que algunos tratan de
disfrazar con todo tipo de cuentos, como deudas soberanas, déficit o gastos por encima de “nuestras”
posibilidades, ha
tenido (y tendrá) como primera
consecuencia un empobrecimiento general de la mayor parte de la sociedad. Como ya digo, hasta aquí, ya nada de esto es novedoso.
La gran estafa se ha cebado en una serie de
países con más o menos profundidad. Sin embargo, en el caso español se han dado
además una serie de circunstancias que la han agravado mucho más en relación
incluso con otros casos muy duros, porque el retroceso económico viene acompañado de una brutal
reconversión social de la mano de la derecha más reaccionaria del mundo.
No se puede negar que al día de hoy la UE es
uno de los espacios sociopolíticos en el
que, salvo contadas excepciones, la
libertad, así sin adjetivo, corre el mayor peligro de involución y que
esto da lugar a movimientos extraños que alcanzan gran relieve electoral. Creo que esa no es la solución pero, hoy por
hoy, es una realidad a la que hay que hacer frente.
El resultado de las elecciones en Italia ha
alarmado porque puede provocar inestabilidad en los mercados, pero pocas voces
se han escuchado sobre el fondo de la cuestión; los italianos están hartos de
los viejos sistemas, de la putrefacción que todo lo invade y al votar a Beppe
Grillo, han votado contra todo esto. Si
se hubiera presentado Rocco Siffredi, hubiera pasado lo mismo porque no es
cuestión de liderazgos, sino de hartazgo.
Pero, no nos engañemos: es verdad que desde Berlín se impone una
determinada política cimentada en una
austeridad brutal que, además, busca su propio beneficio a costa de los
demás; es el verdadero rostro de una Alemania tozuda e insolidaria, muy
parecida a la de su reciente y tenebroso pasado . Pero, pese a eso, dudo mucho de que desde el gobierno de merkel
se impongan todos los retrocesos que se ven en otras cuestiones. Se mira hacia
otro lado, eso sí.
Lo mismo que ha pasado durante años y años con la Ley Hipotecaria, ahora puesta en solfa por el Tribunal de Luxemburgo, tras haberse aplicado con ferocidad con cientos de miles de ciudadanos.
Me refiero, entre otras cosas, al ataque sin
cuartel que sufren las llamadas libertades esenciales. Hay una merma evidente de la libertad de acción, manifestación, expresión, etc.
No se trata únicamente de la aplicación de
las medidas más rigurosas de la leyes vigentes, sino de que se pretende cambiar
esas leyes para endurecerlas hasta el extremo de que convierten en delito, por citar un ejemplo, la ayuda a los llamados inmigrantes
ilegales. ¿Es esto parte de la austeridad
de la UE o una iniciativa del PP? Creo
que la respuesta no ofrece dudas.
Los ciudadanos de este país hemos tenido la
mala suerte, bien es cierto que
provocada por una reacción equivocada ante la nefasta gestión del Psoe, de que la estafa económica haya coincidido con un gobierno
reaccionario y liberticida. Pero, insisto, fueron los votos desde la
visceralidad los que provocan esta situación actual.
Los hechos son contundentes: infiltración de
policías de paisano en las manifestaciones,
brutalidad policial evidente pero sistemáticamente negada, encarcelamiento de huelguistas sin pruebas que
justifiquen esa decisión, entorpecimiento de las acciones judiciales
mediante encarecimiento de las tasas, sospechas fundadas de espionaje político, asalto a los medios de comunicación públicos
para manipular sin medida, entre otras muchas más cosas.
Entorpecimiento de las investigaciones judiciales desde el gobierno y desde el PP y, también bastantes veces, desde el Psoe. En esto el bipartidismo va de la mano.
Eso, por no hablar de la complacencia con la
interferencia de la jerarquía católica en aspectos como la educación o derechos
constitucionales como la libre decisión (que no es obligatoria, por cierto) a abortar; la eliminación
arbitraria de la Educación Ciudadana y vuelta a la asignatura de Religión como
materia puntuable.
Los permanentes ataques, desde el propio gobierno, a las parejas
homosexuales que han optado por el matrimonio, sin que se obligue a dimitir a
quienes los efectúan. O a las reiteradas
burlas e incomparecencias de los ministros ante los representantes de los
ciudadanos.
O Intento de cambiar el panorama municipal
mediante la reforma de la Ley de Bases de Régimen Local que va a suponer uno de
los mayores ataques a la participación de la ciudadanía en la democracia que les es más cercana, como son los ayuntamientos que pretende
reducir y dejar solo para aquellos que tengan un gran patrimonio económico.
Podría hablar de muchas más cuestiones, pero creo que no es necesario. Este país
sufre una reconversión social auspiciada por el PP y, tolerada en muchos casos, por su versión amable, el Psoe preocupado solo por recuperar el gobierno a costa de lo que sea.
Lamentablemente en esta situación no toda la
responsabilidad es del binomio turnante del PPsoe.
¿Cómo se entiende, si esto no es así, que se acepte una moción de censura apoyada
por un condenado por acoso sexual para alcanzar una alcaldía? Pero,
al mismo tiempo, cabría preguntarse ¿cómo es posible que un condenado por ese
delito pueda presentarse a unas elecciones y sacar cinco concejales?
9 comentarios:
Sí,primero una ley que impida presentarse a alguien que tenga un delito, por mínimo que sea (y no me refiero a una multa de tráfico).
Pero¿sabes? así nos enteramos de quién es quien y para quién el poder "justifica los medios".
En esta última semana he leído tres post que hablan de libertad: Juan Carlos pone la canción de Labordeta, Madreselva pone un poema recitado. Tu lo hablas , simple y llanamente.
Esclarecedor de los tiempos que corren.
Malos tiempos. Como la cacicada de pescanova.
saludos
Para doblegar a un pueblo hay que tenerlo entretenido y hacerle creer que los males que padece son culpa de otros, nunca de quien les gobiernan. De esta manera se le quita el poder al pueblo y se hace con él lo que se quiera.
¡Pero cuidado!, si se tensa demasiado la cuerda que ata nuestro cuello, si aprietan demasiado, corren el peligro de ser mordidos.
Llevas toda la razón. Son preocupantes los recortes económicos, pero no lo son menos los recortes de derechos. No sé cómo acabará esto, porque estos peperos siguen a lo suyo.
Salud y República
Pues no lo sé, habrá que averiguarlo, besos.
Esto es cada vez más claro: una involución en toda regla.
Gracias por vuestros comentarios y esperemos que esto no empeore aún más.
saludos
Lo que hace falta es más cultura política. Divulgar, difundir. ¿Qué va a esperarse de un país donde el partido de extrema derecha se autodenomina POPULAR? Luego la gente se confunde y vota lo que vota.
No sé si es solo confusión o también que hay mucho desmemoriado.
saludos
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