sábado, mayo 28, 2011

EL GOVERN DE CIU SE TIÑE DEL GRIS POLICIAL FRANQUISTA

La actuación policial en Plaça de Catalunya demuestra bien a las claras, por si alguno tenía dudas, qué métodos utiliza la derecha para intentar liquidar una manifestación cívica: La represión violenta. El Govern de CiU se ha teñido del gris policial franquista a la primera ocasión.


El curioso sistema de limpieza organizado por el conseller de la porra, Felip Puig,  que se ha saldado con muchos heridos y, según parece,  alguno muy grave, es la prueba palpable de lo que se puede esperar en el futuro si continúa el ascenso de los partidos derechistas, civilizados o asilvestrados.

Ayer fue Barcelona, también Lleida, pero hoy o mañana, puede ocurrir en Madrid, Sevilla, Valencia o Zaragoza, porque dominan en todas partes, porque están envalentonados con el triunfo que han obtenido en las urnas, más que por méritos propios, que no los hay, por deméritos de la izquierda, que los hay en gran cantidad y gravedad.

La ciudadanía se expresó el domingo en las urnas y, para demostrar su rechazo al psoe y a su gobierno, se han echado en manos de la derecha. Terrible error que pagaremos todos antes o después.

Soy de los que creo que si se pueden criticar abiertamente los resultados electorales por muy soberanas que sean las decisiones de los electores.

En Madrid, hace ya días que se pide el desalojo por la fuerza de las concentraciones de la Puerta del Sol. Hasta ahora, con buen criterio, el Ministerio del Interior, ha actuado con prudencia.

Pero no sé si esa prudencia ha sido consecuencia de que se iban a celebrar elecciones y no se quería echar más leña al fuego de la debacle socialista, o por la sincera convicción de que por la fuerza no se paran las ideas regeneradoras.

No soy optimista y creo que, más pronto que tarde, la insistente presión derechista logrará su objetivo y la concentración de Sol, como ayer de Barcelona, conocerá la contundencia higiénica de la policía.